domingo, 16 de diciembre de 2012

El Corinthians se impuso al Chelsea.

Un equipo brasileño como el Corinthians tiene que sufir mucho para ganar a un equipo grande como es el Chelsea, no entiendo como dió ese bajón a partir del descanso. Parecía que se iba a llevar el partido ya que en la primera parte dió un recital, pero el fútbol es así, tras el descanso, el Corinthians se fue arriba dispuesto a llevarse el partido. En los minutos finales el Chelsea parecía despertar pero Cahill midió mal una entrada a Emerson y le costó la tarjeta roja, minutos después, en el noventa, los aficionados y suplentes del equipo brasileño ya estaban levantados celebrándolo, pero Mata calló a todos llevandose un balón que parecía perdido al borde del área pequeña regateando al portero pero ya sin ángulo remató al palo.

Los aficionados del equipo inglés se llevaron una desilusión enorme por no ganar este título importante tanto para ellos como para Rafa Benítez, ahora, la grada se volcará todavía más en querer echar del banquillo a Benítez. Podría haber jugado con el once de la semifinal, le funcionó con David Luiz de mediocentro y Mata mas arriba ya que no se desgastaba tanto físicamente, pero optó por lo seguro y usó la alineación habitual cayéndose del once titular Óscar, un jóven brasileño de juego parecido a Mata, ahora sí, el Corinthians tiene jugadores con la calidad que tiene todo jugador brasileño, y Guerrero enchufado marcando el gol de la victoria en la semi, y en la final.

El árbitro, inflexible en sus decisiones, actúo como debe de hacer, dejar seguir el juego siempre que se pueda jugar el balón; los líneas perfectos, y los jugadores siempre con deportividad, sin protestar excepto en alguna ocasión clara, las pocas tarjetas que sacó a pasear fueron justas. Mucha sangre fría en el fuera de juego pitado a Fernando Torres en el 91', bien pitado.

                                Por @Nanoportero